Corte de digestión: prevención del corte digestión y ahogamiento
El corte de digestión es un aumento de la presión arterial debido al reflujo de sangre causado por la contracción brutal de los vasos. En efecto, a temperatura caliente, los vasos se dilatan y la circulación aumenta, mientras que a baja temperatura, es lo contrario (de ahí el interés de refrescarse la nuca antes de entrar en el agua fría con el fin de "acostumbrar" su cuerpo a la temperatura). El corte de digestión se llama también una hidrocución porque, como una electrocución, el choque es de repente y puede provocar el coma (a menudo seguido por ahogamiento) hasta un paro cardiaco.
La prevención del corte de digestión y del ahogamiento se basa en sencillas precauciones.
- No beber alcohol antes de entrar en el agua.
- Entrar poco a poco en el agua, si el agua está fría, si ha estado mucho tiempo al sol, o después de una comida pesada.
- No bañarse si no se encuentra bien.
- Salir del agua en cuanto tiene frío.
- Elegir bien la zona de baño. Preguntar a los lugareños y preferir los lugares vigilados. Respectar las prohibiciones y consignas: zonas de baño, áreas de surf, existencia de corrientes peligrosas, presencia de medusas, etc... Como regla general, desconfiar de las playas no frecuentadas.
- Consultar la meteo local: cuidado con las tormentas que pueden aparecer al final de la tarde.
- Cuidado con las olas: las olas son particularmente peligrosas en su punto de impacto. Infórmese sobre la presencia de olas fuertes que pueden dificultar el regreso a la orilla.
- Tener en cuenta las corrientes: las mareas pueden crear corrientes muy peligrosas que alejan de las costas, infórmese.
- Nadando o buceando, preste atención a las embarcaciones.
- Cuidado con las piscinas resbaladizas, las rocas o orillas escarpadas; pueden provocar caídas y no siempre ofrecen la posibilidad de remontar.
- Nunca bañarse solo. No presumir de sus fuerzas y no alejarse demasiado de la orilla de la playa, especialmente si el agua está fría. Cuidado con las corrientes, a menudo están implicadas en los ahogamientos. Si está atrapado en una corriente y no consigue salir, no cansarse intentando luchar contra ella. Dejarse llevar nadando hasta la orilla, aunque este lejos de su punto de partida.
En caso de dificultad, es importante intentar luchar contra el pánico. Déjese flotar en lugar de tratar de luchar contra la corriente o las olas. Agite los brazos únicamente si está seguro de que alguien tiene la oportunidad de verle. Nade sin prisa o hacer la plancha sobre la espalda moviendo los pies hasta la llegada de los socorristas. Los movimientos frenéticos agotan rápidamente y un cuerpo relajado flota mejor que un cuerpo rígido. Oblíguese a relajarse y a respirar profunda y lentamente.
Corte de digestión: Las personas en riesgo de sufrir un corte digestión
Algunas personas son más propensas a sufrir un síncope de hidrocución. A continuación las explicaciones:
Para todo el mundo (factores temporales)
1° Evitar cualquier exposición prolongada e inmóvil en pleno sol justo antes del baño, así como cualquier esfuerzo físico muy intenso que se acompaña de trastornos circulatorios cutáneos con transpiración;
2° Evitar las entradas y salidas sucesivas del agua excepto en piscinas, con exposiciones en alternancia, o bien a la luz solar directa, o bien a la sombra o en una corriente de aire que puede provocar trastornos circulatorios de la piel con escalofríos y "carne de gallina". La aparición de una de estas dos señales de alarma prohíbe formalmente el regreso al agua "para entrar en calor".
3° Evitar todo lo que puede causar temor o incluso un choque emocional:
- No-nadador que pierde pie súbitamente;
- Juego que consiste a sumergir bajo el agua a un amigo que no se lo espera;
- No-nadador sobre un aparato neumático que vuelca a menudo;
- Esperar siempre tres segundos antes de saltar y efectuar un rescate;
4° Evitar el periodo digestivo durante las tres horas después del final de una comida para entrar en el agua. Para los nadadores experimentados, asegurarse en ayuno de la ausencia de cualquier reacción anormal durante el baño. Si no hay reacción, y según la temperatura del agua, puede bañarse brevemente durante la digestión.
5° Evitar cualquier esfuerzo físico intenso o prolongado en el agua, sin entrenamiento previo y progresivo.
Personas enfermas (factores permanentes de riesgo). Deben tener especial cuidado:
1° Personas con enfermedades alérgicas: asma, urticaria, alergia al frío, alergia al agua dulce o agua salada, etc., que refleja dificultades de adaptación respecto a agentes agresores como el agua fría;
2° Personas con dolencias o enfermedades acompañadas de tendencias sincopales o pérdida de conciencia, en particular: epilepsia, crisis nerviosas, neuroendocrinas, circulatorias o del hígado, etc. así como mareos causados por intoxicaciones recientes o terapias con tranquilizantes, etc.);
3° En caso de antecedentes de lesiones cerebrales por accidentes de tráfico: más de 30.000 jóvenes de menos de 15 años son heridos cada año en accidentes de tráfico con un gran número de conmociones cerebrales y pérdidas de conciencia susceptibles de provocar un corte de digestión;
4° Cualquier pérdida de conciencia, o incluso cualquier tendencia sincopal prohíbe el baño o el buceo durante los dos días siguientes. El baño o la inmersión siguiente debe realizarse con una supervisión cuidadosa.
Corte de digestión con sol y agua fría: Un choque térmico que puede ser letal
Una exposición prolongada al sol con altas temperaturas, seguido de un baño repentino en agua fría a 18° C por ejemplo, puede ser letal debido al choque térmico (la temperatura central del cuerpo es de 37° C. Los 4 factores que causan el corte de digestión:
Radiación solar: calentamiento de las condiciones ambientales por radiación (el sol calienta la atmósfera terrestre).
Conducción: transmisión de calor a través del cuerpo conductivo (la conductividad varía con el cuerpo).
Convección: las moléculas de agua se calientan en contacto con el cuerpo y son reemplazadas por moléculas frías (corriente de convección). Si el bañista se mueve en el agua, este proceso se acelerará.
Evaporación: la transformación de un líquido en vapor consume mucha energía térmica.
El cuerpo se enfría 25 veces más rápido en el agua que en el aire. Se enfría también 40 veces más rápido si hay movimiento de agua (nadar).
Por ejemplo, si una persona con chaleco salvavidas no se mueve en el agua, aumentan sus posibilidades de supervivencia un 35%.
Una persona sin ropa e inmóvil en un agua a 5ºC muere en 30 minutos; en un agua a 15° C, este período se amplía a 1 hora 30.
Prevenciones
- Evitar el cambio repentino de temperatura.
- No realizar una larga exposición al sol antes de bañarse.
- Humedecer la nuca, el pecho y el abdomen antes de entrar en el agua.
- No saltar en agua muy fría.
- Evitar bañarse en agua fría después de una comida.
- Alimentación equilibrada y buenas aptitudes físicas.
Síntomas del corte de digestión
• Síncope que favorece el ahogamiento.
• Señales de advertencia: malestar general, dolor de cabeza, zumbido, trastornos de la vista, parálisis de las extremidades.
Medidas a adoptar en caso de corte de digestión
• Salir del agua, reanimar si necesario, calentar sin friccionar.
Corte de digestión: ¿Verdadero o falso? No hay que bañarse después de comer
Es mejor abstenerse de bañarse después de una comida importante y después de la absorción de bebidas alcohólicas, ya que la digestión usa una parte de la capacidad energética del organismo. Está totalmente desaconsejado bañarse varias veces consecutivas. Los mecanismos termorregulador del cuerpo se activan rápidamente (5 minutos después del final del baño), pero no restablecen un nuevo equilibrio entre la temperatura exterior y la del cuerpo hasta después de una hora. Hasta que no se logra ese equilibrio, hay un riesgo de corte de digestión. Hay que evitar entrar repentinamente en agua fría, especialmente después de una exposición al sol o de un gran esfuerzo físico. Sin embargo, se recomienda refrescar la nuca y la parte frontal del tórax con un poco de agua para preparar el cuerpo al baño.
Corte de digestión y deporte: una ducha fría, ¿ventajas o riesgo de corte de digestión?
La ducha fría es un buen ejercicio vigorizante y de fortalecimiento de los músculos. Sin embargo, la ducha con agua fría es a evitar después de un entrenamiento deportivo: el choque térmico es demasiado grande y malo para el corazón. Hay que evitar lanzarse bajo la ducha fría directamente, cabeza primero. Conlleva el riesgo de perder la conciencia con el choque térmico del agua fría, en el mejor de los casos de tener ligeros mareos durante 5 segundos. Es más recomendable ducharse las piernas, y luego mojarse el vientre y el torso con las manos y finalmente ir debajo de la ducha. El cambio de temperatura es gradual, y es bueno para la circulación sanguínea.
Después de practicar deporte, lo ideal es la ducha tibia, porque la pérdida de conciencia puede ocurrir con una ducha fría, al entrar en el agua, o incluso en el vestuario después de la salida de la ducha.
En caso de contracción muscular, es posible poner hielo localizado después del entrenamiento. El hielo nunca debe ponerse en contacto directo con la piel. Se puede colocar una toalla entre los dos. Es recomendable colocar el hielo durante veinte minutos en los músculos que se desean enfriar. Si es la primera vez que utiliza hielo, vaya lentamente. Puede doblar el grosor de la toalla. De hecho, contrariamente a lo que muchos creen, el hielo es como el calor: puede quemar la piel. Finalmente, el hielo no produce sus efectos reparadores en pocos minutos, la aplicación de hielo necesita ser repetida en el tiempo con intervalos de una hora por ejemplo.
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